Iran , el pais donde un cuerpo de mujer es delito

El chador negro oculta de pies a cabeza la belleza de las mujeres iraníes. “Tapar para proteger”, dice el Islam chiíta que reina en el país de los ayatolas. La gruesa tela negra con la que las mujeres deben cubrir su dignidad es la imposición de un régimen que se vanagloria de ser la única “República Islámica” del mundo, aunque en la práctica sea una teocracia donde los religiosos lo deciden todo.
El pelo de las mujeres es hermoso y por eso debe ocultarse, hasta el punto de que está prohibido incluso en los anuncios de champú. Las curvas femeninas son bellas y por tanto representan el peligro, así que la gabardina por debajo de la rodilla, sumada a la falda larga o a los pantalones, son otra obligación. El rostro es la única parcela de libertad estética que tienen las mujeres de la Revolución, de ahí que Irán sea uno de los primeros países del mundo en operaciones de nariz. Tampoco se permite ningún contacto público entre hombre y mujer. Nunca un matrimonio puede pasear cogido de la mano, nunca puede besarse o tocarse en la calle, nunca hay afectividad manifiesta. Detrás de todas las prohibiciones está el argumento de que hay que proteger a las mujeres, tal y como el profeta Mahoma encargó al hombre. Por esa razón tampoco se permite que accedan a los campos de fútbol: las palabras soeces que profieren los hombres en ese tipo de eventos perturbarían la delicadeza femenina. La obsesión del régimen, y por extensión de parte de la sociedad masculina, por el sexo “débil” hace que la desnudez sea, no sólo un tabú, sino algo prácticamente proscrito y que se vive, única y exclusivamente, en la más absoluta intimidad
De este modo se explica el escándalo provocado por la difusión de un vídeo casero en el que se ve a una mujer –supuestamente la famosa actriz Zahra Amir Ebrahimi- manteniendo relaciones con su novio. Lo explícito en el país de lo implícito es pecado mortal, así que el Gobierno del radical Ahmadineyad ha reaccionado al escándalo promulgando una ley en la que se castigará la pornografía con la pena de muerte. Los “corruptos”, dice el Corán, son los peores criminales, así que a partir de ahora quienes produzcan pornografía se enfrentarán a la horca, lo mismo que los traidores, los homosexuales, las prostitutas o los espías.

Fuente : Telecinco